MITOS SOBRE LA ALIMENTACIÓN DE LOS GATOS

Ideas como que el gato es un gran consumidor de pescado o que un gato puede alimentarse bien con las sobras del almuerzo son falsas creencias y de hecho pueden llegar a ser muy perjudiciales para su salud.

El gato es una de las mascotas más comunes en todo el mundo y por eso puede ser peligroso que los dueños de estos animales den por ciertas muchas creencias falsas que existen acerca de la alimentación de estos pequeños felinos.
El medio 20minutos repasa algunos de estos mitos y esclarece en qué medida son equivocados, ya que en ocasiones, muchas de estas ideas pueden tener consecuencias graves para la salud del gato:

1. El gato es un gran consumidor de pescado:
En primera medida, esto se desmiente con la idea de que el físico de estos animales (salvo algunas razas específicas) está adaptado para que sean cazadores terrestres eficaces. Por lo que el pescado no tendría por qué estar relacionado a su dieta.

2. Las sobras de comida son buenas para el gato:
Un gato que se alimenta con restos de comida carece de una dieta equilibrada y puede padecer ciertos problemas de salud relacionados con su funcionamiento gastrointestinal, que se pueden traducir en vómitos y diarreas.
Hay alimentos adecuados y específicos para gatos, que pueden aportarles todos los nutrientes que precisan y además dirigidos exclusivamente para la etapa etaria en la que se encuentran y así propiciar el correcto funcionamiento de su metabolismo.

3. Sobrealimentar al gato es sano:
Los gatos tienden a racionar su comida. Como cazadores innatos, los gatos durante el día pueden ir varias veces al día a su plato sin acabárselo todo en cada ocasión. Sin embargo, muchos gatos que se aburren solos en casa, ya sea porque carecen de actividades o de algún compañero de juegos, acuden a comer muchas veces al día y esto a la larga les provoca obesidad.
Este problema se considera la forma más común de malnutrición entre las mascotas y afecta a alrededor del 40% de perros y gatos, según estudios de Royal Canin sobre conductas alimentarias de los gatos.

4. Los gatos pueden ingerir cualquier alimento:
Aunque el paladar del felino no se siente atraído por el sabor dulce, conviene saber que el chocolate resulta tóxico para el gato y que en grandes cantidades puede resultar mortal.
Otros alimentos peligrosos para el gato son la cebolla y todas las verduras pertenecientes a su familia, como los puerros. Los guisos caseros o las sobras de comida que contengan estos alimentos, lejos de resultar beneficiosos para el gato, le pueden hacer enfermar.

5. La leche es nutritiva para ellos:
La leche tradicional que se suele consumir en el hogar no es la indicada para los felinos, ya que poseen intolerancia a la lactosa, por lo que su consumo puede provocarles problemas estomacales.